"El futbol me dio una gran mano"
"Siempre tenemos algo para contarles"
Brahian, un joven de 14 años, vive una vida de lucha diaria junto a su mamá y sus dos hermanitos en la localidad de Sol y Verde, en José C. Paz. A pesar de las dificultades, un encuentro casual con un vecino de Villa del Parque cambió su vida para siempre.
Mientras recorría el barrio en busca de ropa y comida, Brahian decidió tocar el timbre de una casa, impulsado por un sentimiento que no podía ignorar. Allí conoció a Sebastián, un socio de Vélez y amante del fútbol, quien no solo le ofreció lo que necesitaba en ese momento, sino también una oportunidad inesperada.
Sebastián no solo brindó apoyo material, sino que, movido por la empatía, propuso al club Vélez Sarsfield que le dieran a Brahian la oportunidad de jugar fútbol en sus instalaciones. Hoy, gracias a la solidaridad de Sebastián y al apoyo de la comunidad de Vélez, Brahian entrena dos veces por semana y juega los sábados, encontrando en la cancha un refugio que le permite olvidar, aunque sea por un rato, las dificultades de su vida diaria.
La historia de Brahian es un testimonio del poder transformador de la solidaridad y el impacto que un gesto de bondad puede tener en la vida de una persona. Su madre, Lourdes, no puede evitar emocionarse al recordar el esfuerzo que han hecho para que su hijo no pierda esta oportunidad. "Estoy feliz de haber encontrado a una persona que lo apoye mucho, que le permitió llegar a un lugar donde nunca pensamos que iba a estar", expresa con gratitud.
Comentarios
Publicar un comentario